Viva Chile?

Se acaban las fiestas patrias, quedan a esta hora los puestos inanimados de las fondas, restos de comida que uno u otro perro terminará por recoger.
Desfilaron ya los aviones demostrando su preparación ante cualquier conflicto al igual que los buques, submarinos y todas esas artimañas materiales listas en caso de guerra. Estamos protegidos.
Se bailó más cumbia que trote, más reggetón que cueca. Se comió, se bebió... los fonderos sacan cuentas alegres en este 18 de Septiembre tan particular.
Y entonces los canales de televisión vuelven a sus transmiciones habituales, mientras yo me quedo con un sabor amargo en la boca... la verdad es que no sentí el bicentenario de mi país como supuestamente lo vivió el resto de los ciudadanos, no disfruté... no pude hacerlo luego de saber todo aquello que no muestran en la televisión, de ver espectáculos vacíos, censura después de 200 años... tratando de hacer que olvidemos nuestra historia, que nos volvamos indefensos.
Mapuches muriendo de inanición y una nueva ley como arma de doble filo aguardando en el congreso. Un presidente que figura en cuanto se le presenta oportunidad, palabras vacías, sucedáneos de la igualdad y la justicia, hombres y mujeres que desamparados en las calles buscan algún bocado mientras cerca comen y beben como nunca... mal que mal son 200 años los que celebramos.
Isla de Pascua sigue con la represión militar silenciosa, y nadie se entera, nadie se entera...
Con esta sensación me despido de este bicentenario, y es que no se puede celebrar tan a gusto cuando pasas por la calle y ves a la gente vacía caminando, sin mirar ni un centímetro hacia el lado. Sin sentir. Luego mirar la televisión y encontrarse con mil millones gritando viva Chile... pero qué hacemos para construir la patria? si no sabemos lo que hicieron otros por ella, si no podemos vivir apasionados por ella como lo hicieron tantos en el pasado... aquellos que independiente de sus confrontaciones construyeron realmente hace 200 años un nuevo Chile, limpio y libre... dónde quedó eso? dónde está el respeto... a mapuches, a pascuenses, mineros, indigentes... aquellos a los que la patria les duele como nunca en doscientos años, no porque sus condiciones sean peores, si no que por que el Chile que vivimos no concuerda con aquel que creemos vivir.