Desde mi ventana
Luego de limpiar la ciudad
Tras la impredecible lluvia santiaguina
sábado, 10 de septiembre de 2011
Me tomas, me vuelcas, me aprietas, me elevas, así es como tus brazos, látigos de aire, me encierran y me dejan girando en el centro, arrasas todo con tu voz fuerte, cálida, amiga...
Sin embargo, siempre fueron tus ojos,
uf!, tus ojos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario